Uno de los grandes temas de la crianza, es cómo poder educar un valor tan relevante para la vida, como la responsabilidad desde que los niños son chicos. No se trata de educar niños perfectos que obedezcan a todo, por el contrario, seres humanos con empatía y comprensión de que las acciones individuales, también tienen un impacto en el resto y en uno mismo.
Hay que recordar que lo natural es que nos cueste cumplir órdenes impuestas, sobre todo cuando somos pequeños. Siempre habrá algo más entretenido que hacer.
Para ayudarte en esta tarea “no tan sencilla” queremos compartir contigo algunas pautas para que refuerces la responsabilidad en el día a día con tus hijos.
Comencemos por definir qué es la responsabilidad
Se define como una característica positiva de los seres humanos, que implica el cumplimiento de las obligaciones adquiridas, a través del compromiso que se ha suscrito con algo o alguien.
Acciones del día a día que educan en la responsabilidad
- Ofrecer tareas sencillas, como dejar su ropa sucia en el canasto, o guardar sus juguetes, e ir incrementándolas poco a poco, con el fin de que los niños se vayan acostumbrando paulatinamente al ejercicio de la responsabilidad, y lo consideren como un valor alcanzable y no les genere frustración.
- Enseñarles que parte de la responsabilidad es también hacia uno mismo. Si te dicen que están aburridos, contarles que es su responsabilidad elegir qué actividades quieren hacer para entretenerse: pintar, hacer una obra de teatro, cocinar o ir al parque.
- Al comenzar el día, reforzar los hábitos de higiene básicos (lavarse la cara y los dientes), aunque no lo hagan a la perfección. El dejar que lo hagan por sí mismos es un pase para que sean responsables y lo puedan repetir día a día.
- Crear un tablero con una lista de ítems que deben hacer día a día. En ella puedes incluir el vestirse solos, lavarse los dientes, levantar su plato después de comer y ordenar los juguetes luego de usarlos. Así el cumplir con sus responsabilidades se convertirá en un juego y no tendrás que estar recordándoles todo el tiempo. Así estas tareas se convertirán en una rutina establecida.
¡Hay muchas formas de enseñar a los más chicos a ser responsables y las puedes aplicar todos los días!
